En el entorno del Parque Nacional de Doñana podemos contemplar diversos matorrales entremezclados que conforman el
monte blanco que ocupa los suelos más pobres y secos. El
monte negro se fija en las zonas más húmedas donde crecen alcornoques, brezos y helechos, y en lugares más elevados bosques de sabinas. También el sur del parque está ocupado por el pinar que se une en las dunas y corrales a clavellinas y siemprevivas.
La fauna de las marismas se caracteriza por su gran
riqueza ornitológica, recibiendo sus alcornocales la visita de gansos, cercetas, patos, garzas, espátulas y porrones, llegando a sumar el medio millón de individuos. En los campos destacan le venado, el meloncillo, el águila imperial y como no
el lince ibérico del que aun quedan algunos ejemplares de ejemplares.